Este Plan se implementa teniendo en cuenta las demandas de las instituciones. Su diseño, seguimiento y evaluación se coordinan con los distintos agentes del territorio. El proyecto aporta la herramienta, el deporte y se complementa con el resto de servicios y entidades para dar una visión comunitaria en la intervención, introduciendo elementos formativos, de prevención, salud o inserción laboral.
Podemos diferenciar tres tipos de actuación:
Organizamos las actividades en colaboración con distintas entidades y servicios del territorio. Estas actividades se adaptan al contexto y la situación del joven y cuentan con el apoyo de un educador, entrenador o árbitro, dependiendo del formato. El joven se beneficia de las ventajas de la práctica deportiva y se identifican sus inquietudes formativas y profesionales para dar apoyo en su desarrollo y, en algunos casos, potenciarlo como futura monitora o monitor de nuestras actividades.
Mediante las entidades que colaboran con el Programa, se identifica a jóvenes que participan en el plan de formación de la FEEB. Estos jóvenes pueden llegar a ser monitores una vez superado el proceso de capacitación.
Desde este programa se promueve la imagen de los jóvenes del barrio como monitores bien firmados. Estos jóvenes se convierten en un referente positivo para el barrio, dado que han adquirido responsabilidades, poseen una nueva fuente de ingresos y la capacidad de volver al circuito educativo. A través del Programa Q y la formación continuada de la FEEB, estos jóvenes pueden mejorar su intervención como monitores.